sábado, 7 de junio de 2014

Arrojados al mundo, ¡¡¡¡¡Incluso los ángeles se arrojan literalmente al mundo!!!!!. unos apuntes acerca de: "El cielo sobre Berlin" y "Tan Lejos, Tan Cerca" de Win Wenders.


Viajemos por un momento al Berlín de 1987 y al de 1993, bajo la particular visión del director alemán Win Wender, para hablar de espacio y ¿filosofía?. Porque el asunto es el siguiente, no se nada de filosofía pero estas dos películas me han sumido en un remolino de creatividad, el cual no debo dejar escapar.

Y con ganas de comenzar a dar rienda suelta a mis palabras hablemos del espacio. En "el cielo sobre Berlin" película de 1987 próxima a cumplir los 27 años, se privilegian las vistas aéreas de la ciudad que combinadas con las escenas en tierra muestran a Berlin como un personaje más, lleno de matices y fragmentado. Pero la característica principal que deseo destacar es que por medio de la sensibilidad cinematográfica de Wenders puedo conectar con una ciudad y conectarme con ella como espacio existencial.
Es difícil hablar de un espacio existencial en el tiempo que no he experimentado y que al cual sólo tengo acceso, desde el cine. Pero no creo que la ciudad de Berlin donde se ambienta la película sólo sea un contenedor de las acciones narrativas del guión. 
Pero debo admitir que la Berlín de Wender no es del todo un espacio existencial porque para el espectador que contempla la pantalla, se podría decir que esta ciudad se convierte en un espacio subjetivo ya que es un sujeto en este caso el director que a través de su lente impone una serie de relaciones entre los distintos elementos  de ese espacio: es decir, los actores, las escenas, las locaciones, la acción narrativa. 



A nivel de relación entre película y espectador, este último contempla Berlin como un espacio de la subjetividad del director, pero si nos adentramos en el campo de la historia, de lo que nos cuenta la trama, pienso que la categoría cambia a espacio existencial ya que los lugares, las tomas, los planos que nos muestra el director están interconectadas con las experiencias de los personajes. En este sentido vemos que la omnipresencia de los ángeles se expresa en las tomas aéreas y se seleccionó un espacio como la Biblioteca Nacional de Berlin, para sugerir esa capacidad de los ángeles de poder escuchar de manera simultanea los pensamientos de las personas. Ya que en la biblioteca, ese espacio inmenso habitado por muchas clases de individuos se muestra mejor la capacidad de acompañamiento de los ángeles que vigilan cada uno de los habitantes de Berlin, sin importar quienes sean. También puedo agregar que el carácter errante de la acróbata se expresa en espacios deshabitados, abandonados y en la misma idea de espacilidad implícita en el circo.


En términos generales el Berlin que vemos en el año 87 trasmite una sensación de un espacio en proceso de construcción, pero a la vez como si tuviese herida, esto lo muestra escenas como las del principio de "El cielo sobre Berlin" cuando se muestra la torre de La Iglesia a la Memoria o cuando aparece el propio muro esta vez en colores después de que Damiel cae al mundo y se convierte en un ser humano.
La noción espacial se manifiesta de forma más literal en la película del año 1993, Tan Lejos, Tan Cerca  que hace directa alusión a la relación existente entre la espacialidad de los ángeles con respecto a la nuestra, ya que estos ángeles, aunque no de forma física, están muy cerca de los hombres, pero a al ves la vida cotidiana en 1993, la forma de ser-en-el-mundo de los habitantes de Berlin ha separado, alejado a los ángeles del propio vivir de los berlines, de sus expectativas y de sus creencias. 
Es por lo anterior que las nociones de lo cercano y lo lejano que son contradictorias para el espacio objetivo, funcionan en la película si las relacionamos con el espacio existencial tanto de ángeles como de personas. 

Por otra parte pensemos en los personajes principales, nuestros ángeles Cassiel, Damiel y Rafaela. Seres omnipresentes y omnipotentes, pueden volar, escuchar los pensamientos de los seres humanos, pero no pueden ver en color ni sentir nada ante el tacto. Además estos seres alados están por encima del tiempo, pueden observarlo sin ser afectados por ello y del espacio porque pueden volar a libertad y no están marcados por la necesidad de permanecer o establecerse en un lugar especifico. 



Pero empecemos con Damiel, el ángel que podía ver y no tocar ni sentir, cuida a una artista de circo y se enamora de ella, una mujer que vestida de ángeles hace piruetas sólo sostenida por una cuerda y quien vive de manera errante, visitando clubs underground de Berlin. Estos dos seres de las altura se encuentran y él la mira sin ella saberlo. 
Del anhelo silencioso de Damiel, se pasa al amor y este ángel decide  renunciar a la eternidad y literalmente se arroja a la tierra, para conseguir su humanidad, cosa que repite Cassiel bajo otras motivaciones, en la secuela, Tan Lejos Tan Cerca. En este momento me perdonarán, pero no puedo evitar relacionar esta metáfora con el concepto de ser-en-el-mundo, idea clave para la fenomenología. Y es que podemos  establecer una serie de paralelos, ya que si bien la fenomenología busca ser un camino de pensamiento que nos arrastre fuera de las relaciones sujeto-objeto establecidas por el racionalismo y el cientificismo occidental. Es precisamente la decisión de Damiel de arrojarse contra la tierra, la que indirectamente son remite al abandono de esa visión panóptica y  por encima de la realidad que él como ser "celestial" poseía, como sujeto que desde fuera contempla las relaciones y la forma como se desarrolla el mundo.


Para Damiel y más tarde para Cassiel  arrojarse al mundo significó ponerse delante y en relación con una serie de cosas, objetos, alimentos, vestuario, vivienda, sabores, olores,  de opciones, de acciones y las consecuencias que estas acarrean. Para mi la experiencia vivida por Cassiel en la tierra es el reflejo de ese ser-en-el-mundo del que habla la fenomenología, porque este concepto habla de la experiencia humana como algo basado en lo práctico, más que en lo reflexivo. La experiencia del ser-en-el-mundo es una  unidad, ya que el individuo como ser-en se superpone a la espacialidad del mundo, es decir la interrelación del individuo con sus espacios genera la experiencia de ser-en-el-mundo.   

Si bien no puedo abarca y desmenuzar la frases todo lo que quisiera en un blog que nadie va a leer, estas dos películas, honesta e ingenuamente me han vuelto el corazón de caramelo y quería dejar esa buena sensación plasmada de alguna manera en estas líneas.

"Nacimos para la muerte" una reflexión sobre la película Melancolía




"Los mortales habitan en la medida en que conducen su esencia propia- ser capaces de la muerte como muerte- usando esta capacidad para que sea una buena muerte. Conducir a los mortales a la esencia de la muerte no significa en absoluto poner como meta la muerte en tanto que nada vacío

Martin Heidegger Construir, Habitar, Pensar 



En la película  Melancolía el personaje principal es Justine quien en mi opinión  parece encarnar lo que sería un ser para la muerte. Pero ¿cual es el significado detrás de la "idea" de muerte? La muerte podría ser entendida como  constante o posibilidad en el amplio espectro  de todos los seres-que-estamos-ahí. 

Normalmente en nuestra vida cotidiana la idea de la muerte es algo que continuamente se posterga, aún en el hecho de muerte de un conocido o en el funeral, siempre pensamos que es ese otro el que se murió, que ya era su tiempo o que se lo buscó. Todo esto porque   siempre vemos la muerte muy lejos...  

Nosotros quienes vemos tan lejos la muerte o quizás la ignoramos para poder "vivir" somos Dasein o El Ser-ahí que paradojicamente es el único ente que tiene la capacidad de morir, porque si bien las vacas, los perros y las jirafas en algún momento terminan su existencia, no están conscientes de que van a morir. En cambio los seres humanos por más que lo quieran ignorar o apartar, siempre tienen la posibilidad  de que en algún momento van a morir porque  de todos los caminos y las opciones que una persona puede escoger durante su paso por el mundo, la única que ya le esta designada y es ineludible es la muerte.

Partiendo de la idea de la inminencia fundamental de la muerte para el ser-ahí, habrían dos tipos de existencia si la tomamos en relación con la muerte. Habría una existencia inautentica que vive para negar que va a morir y se atosiga de cosas para sofocar en si, la idea de la muerte. Y una existencia autentica 
es aquella que  asume la idea de que va a morir y que su muerte le es propia, es intransferible. Y es que asumir esa  posibilidad de morir me aísla de los demás, porque pensar en la muerte, en esa posibilidad   confina a un vivir solitario. 

Ya hecho este rústico esbozo del ser-para-la-muerte, retomemos la reflexión sobre la película Melancolía. Justine personaje principal, de buena familia, de buena posición social, con un buen trabajo comienza su historia con el rito social por excelencia, su matrimonio. La recepción del mismo trascurre en un inmenso castillo  propiedad del esposo de su hermana Claire,quien estuvo dispuesto a pagar por tan magno y pomposo evento.


 Si vemos esta primera parte de la película podemos hablar  de entes y situaciones propias de una existencia inautentica y podríamos tomar la unión legal de dos personas: el matrimonio un camino que generalmente conduce a la procreación  y continuación de la especie como el hecho más palpable de nuestra existencia inautentica, porque casarse y tener hijos puede ser visto como una acción  "olvidar" la muerte o tratar de ignorarla. Atosigandonos de acciones o planes a futuro, cosas que van: desde mudarse juntos a comprar un mejor sitio para vivir, trabajar para tener la base económica adecuada  para formar una familia, sacar adelante a esos hijos, esperar que ellos puedan formar una familia propia. Todas esas acciones planteadas hacia adelante, ese futuro de esperanzas e ideales nos atosiga de tal forma que no deseamos pensar en la muerte porque en el horizonte se encuentra un trabajo al cual se debe asistir para pagar una hipoteca, unos hijos que deben ser educados para la vida.



En Melancolía la reunión social entorno al rito matrimonial es el momento de apertura, una celebración por la vida, chocará  con el fin de los tiempos, la inminente destrucción de la raza humana y en la mitad cuatro personajes, Justine, su hermana Claire, su esposo y su hijo.

Clarie y su esposo, no pueden aceptar el fin. Para ella la familia, su hijo, para él es la ciencia, la fe ciega en el proceso científico le permite negar la muerte. Mientras tanto Justine que durante toda la película parece un ente inadecuado para vivir en sociedad, parece aceptar la extinción total de la raza humana con gran calma. Porque como mencionamos arriba una existencia autentica implica la aceptación de la muerte como única posibilidad propia de cada ser humano, aunque aceptar la muerte conlleva  actitud solitaria cosa que podría explicar la forma de ser  aparentemente antisocial y las pocas ganas de encajar en una "vida normal" del personaje principal.

El planeta Melancolía cada vez más se acerca a la tierra y Justine como un ser-para- la muerte, se regocija en la naturaleza y contempla su llegada 

Antes de acabar este post, detengámonos en un aspecto de la película, las locaciones donde fue filmada, porque Melancolía aunque se podría incluir en el tipo de películas de género apocalíptico y catastrófico se sale del escenario de las grandes ciudades y las masa asustadas, ubicando la película en la naturaleza los alrededores de un opulento "castillo".

El espacio en el que se desarrolla la película es importante, pero quiero destacar una escena que me permite hablar sobre un concepto de Heidegger, la cuaternidad y su interconexión  con el habitar. Y es la escena a la que hace referencia la imagen que ven arriba que para mi se convierte en una definición visual de dicho concepto.
En el habitar se vela o se cuida la cuaternidad que esta compuesta por la tierra, el cielo, los divinos y los mortales. Y en la escena donde Justine contempla desnuda al planeta que pronto destruirá a la humanidad, junto a un cuerpo de agua yo veo claramente la cuaternidad:  porque se encuentra la tierra reflejada por el paisaje donde se desarrolla la escena, una naturaleza que se abre hacia el exterior del castillo que parece indómita e interminable según vemos en las escenas en exteriores, dicha naturaleza sostiene la vivencia de Justine. Junto a ella se encuentra el cielo como un camino, una trayectoria en este caso la bóveda celeste la cual contempla la protagonista, es el camino de llegada de Melancolía, el planeta fatal. Los mortales están representados  por Justine quien plenamente consciente de su inevitable final, se prepara para recibir la señal del advenimiento de los divinos. Y en este caso creo que los divinos se reflejan en el planeta Melancolia, una fuerza exterior a la vida y comprensión terrestre que amenaza con acabarla totalmente.

Posdata: Esta es una interpretación libre que fue inspirada por la frase que encabeza el texto, para ver los conceptos en los que me apoye se puede consultar  https://www.youtube.com/watch?v=iE5B2awZcPs, de donde me inspire para tratar de construir un pensamiento personal.